miércoles, 17 de septiembre de 2014

En poesía...

Mexicali 7.2
Por Emerson Augusto Lozada

El desgaste de la vida,
reflejado en sus honduras,
que balanceaban y subían,
al compás de una saliente.

Quebraste todo en mi,
hundiendo mi calma,
tragándote mis recuerdos...
y desalojando mis cimientos.

Hoy, ya nada es lo mismo,
tu cadencia se llevo mi ritmo,
y tus fuerzas mi flaqueza,
hoy solo vago sin rumbo,
al final de aquella grieta.

sábado, 5 de abril de 2014

¿Estamos en una temporada de sismos?

(APUNTES que debe considerar aquel que se dedica a la comunicación de RIESGOS)

Los humanos necesitamos ORDEN, y TRANQUILIDAD porque el fin último es la SUPERVIVENCIA; es complicado y doloroso vivir en CONSTANTE ANSIEDAD por eso, nuestro YO INTUITIVO establece conclusiones apresuradas (y en este caso fuera de la realidad) del tipo: 'Estamos en una temporada de SISMOS'.

Haber ubicado una temporada (debido en parte, a que SOBREDIMENSIONAMOS eventos como el de hace 4 años, al hecho de que es cambio de estación y por lo tanto, de clima, y a la influencia de los noticiarios), nos ayuda a DELIMITAR nuestra ANSIEDAD, nos mantiene medianamente ALERTAS durante ABRIL y OCTUBRE (el otro mes, que algunos han definido como parte de los meses que más tiembla), y tranquilos el resto del AÑO.

Pero, si uno revisa la relación de TERREMOTOS en el mundo durante los últimos 12 años (disponible en usgs.gov), descubrirá que NO EXISTE forma de UBICAR un PATRÓN de OCURRENCIA: Tiembla lo mismo en ENERO que en JULIO, y en las islas Fiji, que en Japón o las Malvinas, en la madrugada, o al mediodía.

CONCLUSIÓN: NO existen TEMPORADAS de SISMOS, es una invención humana para sentirnos tranquilos.

Para que sus mensajes den resultado, los diseñaadores de ESTRATEGIAS comunicativas, deben considerar esta condición del humano.

Nadie dijo que la tarea es sencilla, porque también gustamos de armar historias conspiradoras COMPLEJAS, que se adapten y justifiquen nuestras CREENCIAS...

viernes, 4 de abril de 2014

Mexicali 7.2

Capítulo 6, del libro 'Mexicali 7.2' Una amenaza latente (experiencias del taller de lecciones aprendidas acerca del terremoto del 4 de abril del 2010); publicación editada por la Organización Panamericana de la Salud, y la Organización Mundial de la Salud.

Papel de los medios de información
Lic. Antonio Magaña González
Lic. Victor Martínez Ceniceros


El sismo de 7.2 grados de magnitud, del 4 de Abril del 2010, dejó varias enseñanzas a los reporteros, editores y locutores de los distintos medios de comunicación. Una de ellas, es que no se contaba con la preparación tecnológica y humana para cubrir un desastre de esa naturaleza y, como consecuencia, no se informó, ni orientó, de manera adecuada a la población. La ciudad quedó incomunicada aquella tarde: se suspendió el fluido eléctrico, el servicio de agua, de telefonía celular y los servicios de internet. Después del terremoto, fue imposible mantener el contacto a través de los medios electrónicos con la población afectada.

Otra enseñanza, es que los reporteros y editores no estaban familiarizados con la terminología para cubrir un desastre de esa naturaleza: Magnitud, intensidad, epicentro, profundidad, fallas y réplicas, entre otros.

Tras el sismo de mayor magnitud, hubo secuelas financieras, políticas, laborales, sociales, de salud y ambientales, como la inundación y contaminación de miles de hectáreas del valle agrícola, que los medios de comunicación no cubrieron. La información ofrecida por las autoridades estatales y municipales, fluyó de manera lenta y desorganizada, lo que provocó que se generalizara la alarma e incertidumbre después del terremoto y el subsecuentes réplicas. La alerta por los temblores duró varios días. Con lentitud se evaluaron y dieron a conocer los daños económicos, políticos, sociales y ecológicos que dejó el terremoto, sobre todo en la infraestructura hidráulica del valle de Mexicali.

Los medios de comunicación, principalmente los electrónicos, no unificaron criterios para la cobertura informativa del desastre, ni sobre los contenidos de alerta y prevención a orientar a los damnificados. La sociedad tampoco estaba preparada para enfrentar este tipo de eventos y los medios contribuyeron poco para que las comunidades más afectadas se organizaran con mayor rapidez para superar la emergencia.

Inmediatamente después del terremoto la gestión comunitaria estuvo ausente. Los líderes comunitarios y sus comunidades tardaron mucho en reaccionar tal vez por la falta de información; algunos esperaban que todos los problemas se los resolviera el gobierno, a quien culpaban de las consecuencias del terremoto.

Otra enseñanza, fue la dificultad de los técnicos, y científicos especialistas en la materia para informar al público, de manera sencilla y comprensible, sobre lo que sucedía. A las pocas horas del terremoto, se hizo evidente la falta de coordinación entre los medios, los expertos en desastres y la sociedad.

Como reflexión final, es importante analizar qué están haciendo los periodistas, los medios, reporteros y distintas fuentes de información para lograr una mejor cobertura en caso de otro desastre de similar magnitud. ¿Qué trabajos se han realizado, para que Baja California se mantenga siempre comunicada con el mundo, en casos de un nuevo desastre natural?

El blog Mexicali 7.2, http://mexicalisietepuntodos.blogspot.com se creó para apoyar al fortalecimiento de la cultura de la prevención y concientización de la situación que se vive en Mexicali.